28 de marzo de 2011

Sueño XXXVII: Volver a verla marchar

La noche le trajo el breve pero intenso regalo de volver a verla; un presente de amor y ternura, envenenado con la certeza de que, cuando llegó, ya estaba marchándose otra vez. El despertar le concedió el alivio de saber que sólo había sido un sueño. La vigilia firme le abofeteó el corazón al recordarle que hacía tiempo que se había ido para no volver jamás... pero quedándose para siempre.

5 comentarios:

  1. ...mucho más bonito ahora...
    ...es muy importante la gente que siempre está..., ¡como tú!...

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  2. Bonito... aunque irreal.
    Siempre... pero solo cuando sueño

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  3. Lo que es lo "más bonito" lo decide uno mismo. La amistad no puede ser egoísta, aunque lo adornes con arrumacos. Si no deja de ser amistad y se convierte en intento de posesión

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  4. quien vela por los sueños de loto1 de abril de 2011, 18:04

    También yo soñé que volvía la semana pasada... pero en mis sueños nunca se iba... solo le buscaba la ropa suya que habíamos dado... para que se pudiera vestir....al leerte loto.. se me han caido las lagrimas

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  5. Si pasó la noche contigo...y también la pasó conmigo... Si a ti te dió la coña con su ropa y a mi no me dejó dormir... es que está.

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